Tribunales

La Audiencia Nacional afronta la recta final del juicio Gürtel en Boadilla, que podría suponer una nueva condena al PP

MADRID
SERVIMEDIA

La Audiencia Nacional reanuda el jueves el juicio por las actividades de la trama Gürtel en el municipio madrileño de Boadilla del Monte. La vista entra en su recta final con la presentación de las conclusiones por las partes. En este proceso, el PP figura como partícipe a título lucrativo, por lo que la formación de Pablo Casado podría ser nuevamente condenado por la existencia de una ‘caja B’.

Esa eventual condena sería la cuarta que se produciría en contra de la formación conservadora y serviría para avalar una vez más que el PP manejó una contabilidad paralela que se nutría de mordidas a cambio de contratos públicos.

Los líderes actuales y pasados del PP han venido negando que la Justicia se haya pronunciado sobre la ‘caja B’. De hecho, el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy afirmó en sede parlamentaria que no hay ningún pronunciamiento en este sentido. Lo cierto es que el Partido Popular ya ha sido condenado en tres sentencias, una de ellas firme, por financiarse con dinero negro pagado por empresarios.

En este juicio se cierne sobre el PP una nueva condena puesto que 17 de los 24 acusados han confesado los hechos y admitido que se adjudicaban contratos públicos a empresas de la trama Gürtel, dirigida por Francisco Correa, a cambio de comisiones ilegales. Además de las 24 personas físicas acusadas, se sientan en el banquillo 11 personas jurídicas y el PP al que se acusa de haberse beneficiado de más de 200.000 euros para pagar gastos corrientes y campañas electorales.

Según la Fiscalía, con ese dinero se sufragaron gastos de la campaña autonómica de 2003 y de las generales de 2004. Este extremo fue confirmado por el propio exalcalde de Boadilla del Monte Arturo González Panero en su declaración en la que reconoció haber recibido “llamadas de Moncloa”, entonces bajo los mandos de José María Aznar, para sufragar gastos electorales sin reflejo en la contabilidad oficial del partido.

El regidor del municipio entre 1999 y 2009 aseguró que el PP le dio instrucciones de que había que pagar parte de los gastos de las dos campañas citadas "por fuera". Durante su declaración, que se extendió durante dos jornadas, González Panero aseguró haber recibido "llamadas de Moncloa" durante la presidencia de José María Aznar y directrices del presidente regional del partido, Pío García-Escudero, en relación a varias personas y actuaciones de la Gürtel en el municipio madrileño.

Correa explicó que actuaba como intermediario entre el Ayuntamiento y las empresas adjudicatarias que sólo recibían contratos si se avenían a pagar una comisión que “iba al PP”. "Si se adjudicaba a mi candidato, el empresario me aportaba dinero en efectivo y yo lo llevaba al Ayuntamiento. Se lo entregaba a González Panero", llegó a decir el líder de la Gürtel.

El número dos de la trama, Pablo Crespo, apuntaló esas declaraciones asegurando que las anotaciones de ingresos reflejan esos pagos ilegales. "Esos números son míos y lo tengo claro, los apuntes son fieles. Era una contabilidad B pero era real".

La primera de las sentencias que recogía la existencia de una ‘caja B’ en el PP fue la del juicio por la llamada Primera Época de la Gürtel, que provocó la salida de Mariano Rajoy del Gobierno tras una moción de censura. El fallo fue después confirmado por el Tribunal Supremo. Esa contabilidad paralela también ha sido confirmada por la Audiencia Nacional en el juico por la reforma de la sede nacional del PP en la calle Génova de Madrid, que se pagó en dinero negro en parte. Esta podría ser la siguiente sentencia en la que el PP viera reconocida la existencia de esa ‘caja B’ por los tribunales.

(SERVIMEDIA)
09 Ene 2022
SGR/pai