Aznar intervino como "telonero" del candidato a la Alcaldía de Bilbao, Antonio Basagoiti, durante un almuerzo con unos 400 militantes del Partido Popular del País Vasco. El jefe del Ejecutivo criticó que el líder del Partido Socialista guardase "silencio" sobre los pactos electrales cuando pasado el fin de semana compartió mitin electoral con el alcalde de San Sebastián, Odón Elorza.

Aznar exigió a Rodríguez Zapatero que "diga y exprese algo más que silencio" y aclare "qué es lo que va hacer el Partido Socialista con los votos que reciba". "Todos los ciudadanos que vayan a las urnas tienen derecho a saber lo que va a hacer con sus votos", dijo.

A su juicio, el País Vasco ha recuperado espacios para la libertad y para la convivencia gracias a la colaboración entre las frmaciones constitucionalistas. Pero pidió más, en concreto, "dar un paso de gigante" para que los ciudadanos bilbaínos y vascos tengan alcaldes no nacionalistas.

El candidato del PP a la Diputación de Vizcaya, Carlos Olazábal, fue mucho más duro con Zapatero, al que preguntó si tendría la "vergüenza" de decir delante de los concejales de PSOE y PP que los atentados de Casablanca son una consecuencia de haberse enfrentado al terrorismo. "¡Menuda seguridad que nos está dando el señor Zapatero!", exclamó

PLAN IBARRETXE

Aznar arremetió también contra el "lehendakari", Juan José Ibarretxe, y el plan independentista. Deseó una victoria electoral este domingo en el País Vasco para que la comunidad "no se atasque en laberintos inútiles y no se quede enganchado en propuestas que no conducen a ningún sitio y se enganche a un país que va a tener en los meses venideros más capacidades, más empleo y más prosperidad".

El líder de los populares, que cierra la lista electoral del PP en Bilbao en el puesto número 29", quiso poner en evidencia la actitud que ha mantenido el PNV en los últimos años, desde que hace dos años "juraban por todo lo alto y en las dos lenguas" que nunca colaborarían con el entramado terrorista hasta pedir "prestado" ahora el voto de Batasuna.

"¿Dos años después podemos preguntar qué ha sido de aquella confianza que se dio hace dos años, en qué han quedado aquellas profecías?", preguntó. Aznar afirmó que el PNV no ha tenido firmeza contra el terrorismo ni moderación ni diálogo, ecepto con el entorno de ETA. "Con ellos ha habido todos los diálogos, todas las conversaciones, todos los enredos", apostilló.

CORTO DE IDEAS

El presidente del Gobierno trató de ridiculizar el plan soberanista de Ibarretxe al comentar que el nacionalismo vasco es "corto de ideas" y "las pocas que tiene no son precisamente brillantes", una descalificación muy similar al empleado el lunes en Palma de Mallorca contra el secretario general del PSOE.

Recordó que los únicos que han comprado el Plan Iarretxe son los integrantes de la "familia" nacionalista porque ofrece un proyecto "de ruptura y de exclusión". Aznar bromeó con la posibilidad de mantener un encuentro o un debate con el "lehendakari", a quien sólo plantearía si va a retirar el plan o sigue adelante con el "desafío más profundo a la legalidad y el Estado de derecho". "¿Se va a retirar el plan o vamos de desafío?", preguntó.

"¿Qué se quiere, proteger a los ilegalizados o meter la bolsa en la cesta de los votos de los ilegalizados; quése quiere, apoyar a los jueces o seguir con las querellas al Poder Judicial; qué se quiere, cooperar razonadamente y con sentido común con Europa o apostar por un País Vasco aislado de cualquier situación y presencia, no ya internacional, sino nacional; qué se quiere, defender a las empresas vascas dentro y fuera de España o sólamente a las empresas que se controlan; qué se quiere, apostar por las infraestructuras o seguir apoyando a aquéllos que dicen que es una mala noticia el que pueda haber un tren de lta velocidad que una Madrid con el País Vasco; qué se quiere, el desarrollo del País Vasco y que tenga nuevas infraestructuras ferroviarias o simplemente seguir metido en el laberinto del cual no se sabe salir?", dijo.

El jefe del Ejecutivo explicó que él desea que el País Vasco adquiera un liderazgo en España y en Europa en el aspecto económico, político y social para que cada vez sea "más pujante" y se convierta en un "valor dereferencia". La oportunidad de alcanzar todos esos objetivos pasa por gaar las elecciones del 25 de mayo, en las que confió en tener el respaldo de todos los ciudadanos que votaron al PP en las generales de 2000.

Por último, tanto Aznar como Olazábal pidieron un "esfuerzo" a los militantes y simpatizantes del Partido Popular para que se presenten voluntarios para actuar como apoderados e interventores durante la jornada electoral del domingo, ya que todavía no han cubierto todas las plazas necesarias.