Griñán compareció en rueda de prensa para comentar los acuerdos alcanzados este martes en el CPFF. A su juicio, suponen “una discriminación sobre Andalucía que pone en riesgo los servicios públicos fundamentales”.

Además, insinuó discriminación política a Andalucía y a Asturias por estar gobernadas por el PSOE. “Hay dos comunidades autónomas a las que se les ha modificado el régimen de endeudamiento y ambas tienes presidentes socialistas”, declaró.

En este sentido, afirmó que “no se puede consentir” este trato, puesto que el Estado de bienestar estaría “en peligro”. El cumplimiento del límite de endeudamiento asignado a Andalucía “supondría un golpe durísimo a la educación y sanidad públicas de los andaluces”, porque obligaría a “cerrar 19 hospitales”, todos los existentes en la comunidad autónoma, “despedir 60.000 empleados públicos” o “cerrar la mitad de colegios”.

PRESUPUESTOS PARA 2013

Estos recortes serían los únicos que permitirían sacar adelante los presupuestos autonómicos de 2013, puesto que para dicho ejercicio el Gobierno, según señala en el CPFF, obliga a Andalucía a recortar 2.735 millones de euros con un endeudamiento mayor. “En estos términos, es imposible sacar adelante los Presupuestos de 2013”, indicó, aunque se mostró convencido de que “la privatización de servicios públicos no ahorra”.

Griñán se quejó de la “imposición” del Gobierno central y solicitó “responsabilidad”, “lealtad” y “diálogo”. Diálogo es lo que echó en falta el presidente regional, que acusó al Partido Popular de anunciar unas medidas “sin avisar”, máxime cuando ambos presidentes se reunieron el pasado lunes en La Moncloa y se prometieron “cooperación institucional”.

Además, apuntó que cuando la consejera andaluza, Carmen Martínez Aguayo, abandonó la reunión, “llevaban 30 minutos de negociaciones”, en las que el Gobierno hacía “oídos sordos”.

Por último, el líder autonómico adelantó la convocatoria de un Consejo de Gobierno extraordinario en el que se autorizarán “todos los recursos jurídicos que sean necesarios para defender todos los intereses de Andalucía". También avanzó que abrirá una ronda de reuniones previa a la conferencia de presidentes autonómicos, que Rajoy aceptó celebrar en septiembre, con “agentes sociales y económicos”, con el fin de acudir a la cita con una “posición unánime de defensa de los intereses de Andalucía”.