En declaraciones a Servimedia, ambas entidades se mostraron críticos con esta iniciativa si finalmente se incluye entre las medidas que el Ministerio estudia como parte de la futura Ley para la Mejora de la Calidad Educativa que pretende presentar en otoño.

Según el secretario general de FETE-UGT, Carlos López Cortiñas, de llevarse a cabo en esos términos, el director se convertiría en “un agente de la administración, totalmente ajeno a la comunidad educativa”.

La misma idea expresó el presidente del Sindicato de Estudiantes, Tohil Delgado, para quien el Ministerio quiere de este modo “imponer a su gente en la dirección de los institutos públicos y concertados” y convertir a los directores en “pequeños caciques cuyas decisiones no se podrán ni discutir”.

Además, con la falta de recursos y de fondos para pagar el salario de la dirección, “cada vez habrá menos docentes interesados en asumir esta tarea”, indicó Delgado.

RECURSO AL TC

López Cortiñas anunció que si la medida se lleva a cabo en estos términos, UGT la recurrirá al Tribunal Constitucional, puesto que la Carta Magna habla de un funcionamiento democrático de los centros públicos y sostenidos con fondos públicos que así “dejaría de cumplirse”.

A juicio de Delgado, esta medida “va en la línea de acabar con los consejos democráticos, y eso que ya el peso excesivo de la dirección y del claustro de profesores hacía que las opiniones de padres y estudiantes no contasen para nada”.

La LOE busca que los niños aprendan desde pequeños la importancia del respeto y del consenso, y de ahí el papel de los consejos escolares democráticos”, resaltó López Cortiñas, mientras que “ahora, al igual que con la posibilidad de especialización curricular, se irá hacia otro modelo, con centros de élite y colegios marginales”.