Así lo aseguró hoy el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, en su comparecencia ante la Comisión de Justicia del Congreso de los Diputados.

En concreto, Conde-Pumpido reveló que la Fiscalía de la Audiencia Nacional ha incoado 364 investigaciones por la colocación de cárteles y fotografías etarras en el País Vasco y 83 investigaciones por la exhibición en Navarra.

De todas estas investigaciones fiscales, tan sólo fue necesario presentar denuncia ante los juzgados de la Audiencia Nacional en ocho ocasiones mientras que en el resto de casos la simple apertura de diligencias provocó la retirada de los cárteles y retratos referentes a la banda terrorista.

Las denuncias presentadas dieron lugar a la apertura de ocho procedimientos penales por delitos de enaltecimiento del terrorismo.

Para el fiscal general, estos datos demuestran que “la fuerza de penetración del Estado de Derecho en los pliegues sociales de ETA es cada día más imparable”. “El desenlace podrá hacerse esperar aún más, y con dolor, pero es irreversible”, señaló.

Además, Conde-Pumpido quiso destacar que la estrategia de “desarticulación del soporte logístico y político” que recibe ETA ha conseguido obtener “un Parlamento Vasco libre de representantes encubiertos de los terroristas, con el resultado para la gobernabilidad del País Vasco que todos conocemos”.