En un comunicado, la entidad explica que el Tribunal Supremo ha limitado a 19 meses, tiempo en el que trabajó como una de las entidades depositarias, por lo que se limita también el número de clientes afectados.

La caja señala que la sentencia hecha pública hoy no fija ningún importe concreto para la responsabilidad civil subsidiaria de Caja Madrid Bolsa puesto que, a partir de ahora, se "inicia un período de ejecución de sentencia en el que deberá delimitarse el alcance de la responsabilidad civil subsidiaria de Caja Madrid Bolsa".

La sentencia estima que "tiene razón la recurrente (Caja Madrid Bolsa) al asegurar que nunca podría ser condenada en más de lo debido a su propia intervención en los hechos de la causa, que dio comienzo el 10 de noviembre de 1999, cuando resulta que Gescartera estaba operando desde 1992".