El objetivo del aula es, según han informado las dos entidades, diseñar y distribuir el mobiliario y accesorios de un hogar que facilitarán la vida a personas con algún tipo de discapacidad. Para la creación de este espacio, Ikea ha donado un total de 5.400 euros en mobiliario y productos de decoración.

La instalación del mobiliario en el aula tiene en cuenta las distintas necesidades de sus usuarios. Así, se ha modificado la altura y distribución de una cocina para facilitar su utilización a los pacientes del Servicio de Medicina Física y Rehabilitación y se han buscado soluciones para hacerla accesible a personas en silla de ruedas.

El espacio cuenta, igualmente, con objetos como cucharas para niños, que al estar diseñadas con una anchura mayor de la habitual, no se escapan de las manos y facilitan su uso a los pacientes con déficit del control motor.

Dispone también el aula de sistemas de almacenaje extraíbles, que ayudan a las personas con problemas de movilidad a acceder más fácilmente al interior de los armarios.

"Desde que recibimos el primer embrión de este proyecto, no dudamos en poner nuestra ilusión y entusiasmo para sacarlo adelante", indicó Eva Mengs, directora de Ikea Badalona. "Para nosotros ha sido emocionante descubrir que tenemos productos y soluciones asequibles que, con algunos criterios a la hora de distribuirse, pueden ayudar a mejorar el día a día de personas que viven con algún tipo de discapacidad física".