Según informó la organización en un comunicado, Cáritas Filipinas ha enviado equipos de emergencia a las áreas afectadas por el tifón para que colaboren en las primeras operaciones de socorro.

Así, el padre Edwin Gariguez, director de Cáritas en ese país, explicó que el equipo ha comenzado a proporcionar arroz y ayuda de emergencia a las víctimas, pero que necesitarán “más tiempo y esfuerzo” para organizar de manera adecuada el plan de ayuda a todas las personas afectadas.

Las áreas de Compostela y Davao Oriental, añadió Gariguez, son las que tienen más necesidad de material de emergencia, como mantas, suministros de higiene o toldos para habilitar refugios temporales.

En estas zonas, la red local de Cáritas ha podido poner en marcha un canal de asistencia urgente a las víctimas a través de las parroquias, que se habilitaron como refugios temporales después de recibir el aviso de la llegada del tifón.

Por su parte, Cáritas Española definirá su participación en las labores de emergencia, una vez que el equipo desplazado en Filipinas identifique las necesidades más urgentes y las áreas prioritarias de actuación.