Según informó la petrolera a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el pago se hará efectivo el próximo 22 de diciembre permitiendo a los accionistas beneficiarse del trato fiscal "más favorable que tiene el cobro de dividendos este año frente al próximo", debido al aumento de impuestos aprobado por el Gobierno.

El presidente de Repsol, Antonio Brufau, manifestó ante el Consejo de Administración que “este dividendo compatibiliza una retribución adecuada al accionista con el plan de inversiones encaminado al

crecimiento de la compañía”.

El dividendo a cuenta de 2009 representa el 81% del abonado en 2008, y es acorde con el actual entorno, caracterizado por el descenso de los precios del crudo y de los beneficios en el sector.

Además, en los últimos cinco años Repsol ha incrementado su dividendo significativamente, desde los 0,25 euros por título del año 2004.

El consejo de Repsol se celebra días después de que el principal accionista de la petrolera, Sacyr Vallehermoso (que posee el 20,01%), mostrase su desacuerdo con la política de dividendo.

La compañía que preside Luis del Rivero quería que el dividendo no se resientiese a pesar del descenso del beneficio (un 55% hasta septiembre), y abogaba por modificar el Plan Estratégico del grupo (aumento de desinversiones y poner límite a las inversiones).

A este dividendo aprobado hoy, a cuenta del ejercicio 2009, habrá que sumar, previsiblemente, un extraordinario, cuya cantidad será acordada por la Junta General de Accionistas del grupo, en marzo.

De este modo, cabe prever que el dividendo final para este año ascienda a 0,85 euros por acción, frente a los 1,05 euros por título del ejercicio anterior.