Según informó el delegado del Área de Economía y Empleo del consistorio, Miguel Ángel Villanueva, los inspectores visitarán 1.860 establecimientos comerciales en los que se anuncien productos rebajados.

"Es importante recordar a los consumidores que sus derechos en rebajas son exactamente los mismos que en cualquier otro período del año. Por ejemplo, si el establecimiento admite tarjetas de manera habitual, tiene la obligación de hacerlo también en rebajas", afirmó.

Durante la campaña, los inspectores verificarán, entre otros aspectos, que se exhiben en lugar visible al público las fechas de inicio y final de las rebajas, que dichas fechas de rebajas se adecuan al tiempo establecido legalmente (mínimo una semana y máximo dos meses), que se exhiben los precios inicial y rebajado de los artículos y que no se anuncian rebajas, con carácter general, cuando éstas afectan a menos de la mitad de los productos ofertados.

También tendrán que comprobar los inspectores otros aspectos generales, como que los comercios exhiben la licencia urbanística municipal en lugar visible al público, que existen hojas de reclamaciones a disposición de los consumidores y que se anuncia su existencia mediante un cartel ajustado al modelo oficial o que se admiten tarjetas de crédito y débito en tiempo de rebajas.

"Para este año 2009 están programadas un total de 23 campañas, que nos permitirán inspeccionar más sectores", señaló el delegado de Economía.

El incremento del número de campañas de inspección en los últimos años ha supuesto pasar de las 4.179 inspecciones que se realizaron en 2004 a las 10.381 que se realizaron en 2008. Para el presente año se calcula que las inspecciones serán 10.776.

PRINCIPALES IRREGULARIDADES

Los datos más destacables obtenidos en la Campaña de Rebajas de Invierno 2008 fueron que en el 10,8% de los establecimientos no se exhibían las fechas elegidas por el comerciante para la realización de rebajas, y en el 9,9% de los casos se anunciaban rebajas, con carácter general, cuando éstas afectaban a menos de la mitad de los productos ofertados.

También se comprobó que un 9,6% de los establecimientos que realizaban arreglos y que cobraban por ellos no exhibían el precio de los mismos. Además, un 8,3% de los comercios no mostraban los precios inicial y final de los artículos rebajados en los escaparates y un 6,1% no lo hacían con los artículos expuestos en el interior del establecimiento.

Por último, en el 5,5% de los establecimientos no estaban perfectamente identificados los productos cuando no todos estaban rebajados.

En cuanto a los requisitos generales de los establecimientos, no se exhibía el cartel anunciador de la existencia de hojas de reclamaciones en el 7,1% de los establecimientos, no tenían a disposición de los consumidores hojas de reclamaciones en el 4,8% de los casos, y el 4,2% de los comprobantes de compra entregados a los consumidores no contenían todos los datos obligatorios que marca la normativa.