El maratón, que adelantó su horario ante las elevadas temperaturas de Lyon en estos últimos días, se celebró en dos circuitos de esta gran zona verde de 178 hectáreas, en su mayor parte arboladas. Los atletas tuvieron que completar dos vueltas a un pequeño circuito y después cuatro giros a otro más grande (que incluía una pequeña colina), si bien el recorrido contó con dos tramos adicionales para la salida y la llegada de los atletas.

Abderrahman Ait, que se proclamó subcampeón paralímpico en Londres 2012, era uno de los favoritos al triunfo en la categoría T46 (para deportistas con discapacidad en un brazo), pero a partir de la segunda mitad de la carrera comenzó a sentir muchas molestias estomacales, de manera que no pudo seguir el ritmo del italiano Alessandro di Lello a falta de unos 12 kilómetros para el final.

El fondista español llegó a la meta con un tiempo de 2:37’14”, mientras que Di Lello lo hizo con 2:33’42” y el mexicano Pedro Meza se hizo finalmente con la medalla de bronce (2:48’20”).

Sin embargo, los jueces descalificaron en un principio a Ait por refrigerarse fuera de las zonas establecidas. El atleta barcelonés, aunque de origen marroquí, recibió una botella cerrada de agua, que no pudo abrir por faltarle el brazo derecho. Un voluntario accedió a abrirla y a echarle el agua por encima de la cabeza, motivo por el que inicialmente fue descalificado.

Sin embargo, el equipo español reclamó al director de la carrera, que definitivamente admitió la queja y certificó la medalla de plata de Abderrahman Ait.

OTROS RESULTADOS

Otros tres españoles compitieron en el maratón, con desigual suerte. Manuel Garnica, que participó con sus guías Joaquín de la Vega y Roberto Álvarez, concluyó cuarto en la clase T11 (ciegos totales), al cruzar la línea de llegada con un tiempo de 2:47’50”.

El deportista cordobés se encontraba entre el grupo de favoritos hasta que se descolgó a falta de unos cinco kilómetros al sobrevenirle una pubalgia que le restó opciones para la victoria, pero no para el podio. El chileno Cristian Valenzuela dominó esta prueba (2:44’33”), seguido del japonés Shinya Wada (2:45’34”) y de Garnica.

Por otro lado, Alberto Suárez, actual campeón paralímpico y del mundo en 2011 y uno de los aspirantes al triunfo en la clase T12 (atletas con discapacidad visual), no pudo finalizar la carrera y se retiró a unos 10 kilómetros del final cuando marchaba en la segunda posición.

El atleta asturiano, que corrió con molestias en el tendón de Aquiles derecho, optó por abandonar al tener pinchazos en ambos cuádriceps. El marroquí Amin el Chentouf (2:29’47”) se coronó en Lyon como mejor fondista con discapacidad visual al recibir el oro en el maratón tras los conseguidos en los 5.000 y los 10.000 metros. La medalla de plata fue para el colombiano Elkin Serna (2:40’41”) y la de bronce, para el portugués Gabriel Macchi (2:41”25).

Por último, Roger Puigbó tampoco finalizó la carrera en la categoría T54 (atletas en silla de ruedas) y paró en el kilómetro 28 cuando luchaba por la medalla de bronce. El deportista catalán acusó el cansancio de estos días, ya que durante el Mundial participó en otras cuatro pruebas: 400, 800, 1.500 y 5.000 metros.