EL 37 POR CIENTO DE LOS INCENDIOS FORESTALES DE LA DECADA DE LOS 80 EN ESPAÑA FUERON INTENCIONADOS
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El 37 por ciento de los incendios forestales ocurridos en España en la década de los 80 fueron intencionados, según un "Documento informativo sobre los incendios forestales mediterráneos" elaborado por la Asociación de Defensa de la Naturaleza (Adena/WWF).
Según esta organización conservacionista, el 15 por ciento d las quemas registradas en los bosques españoles entre 1981 y 1990 se produjeron por negligencia, el 44 por ciento debido a causas desconocidas y el 1 por ciento a impactos de rayos.
La asociación ecologista recomienda a las autoridades de los países mediterráneos europeos "incrementar las penas por los incendios intencionados, en proporción con el daño causado".
En opinión de Adena/WWF, en los casos en los que el objetivo sea un beneficio económico, la pena debería aumentarse en consecuencia.
Según el mencionado estudio, el 32 por ciento de los incendios que asolaron la región mediterránea entre 1981 y 1985 fueron premeditados, el 44 por ciento se debieron a causas desconocidas, el 23 por ciento fueron consecuencia de negligencias y un 1 por ciento a rayos.
Uno de los motivos más comunes para prender fuego al monte deliberadamente es "despejar los bosques o las malezas para ampliar las tierras de cultivo y de pasto", afirma el informe de Adena/WWF.
FINES DE LOS INCENDIARIOS
Además "los incendios también se han provocado para el aprovechamiento posterior de los terrenos (por ejemplo en Italia), como resultado de conflictos de propiedad, utilización de las tierras o derechos de caza, para influir en la política forestal local y, a veces, simplemente por venganza personal".
También recomienda esta asociación ecologista enmendar las regulaciones locales "para asegurar que el daño provocado por el incendio no pueda ser utilizado como razón para cambiar el tipo de uso autorizado delterreno".
En Italia está prohibido el desarrollo de cualquier actividad en tierras designadas como forestales tras la destrucción del bosque por el fuego, aunque se debería perseguir una mejor aplicación de estas leyes, indica el documento.
En general, Adena/WWF aconseja a las autoridades de los países mediterráneos reforzar la educación y las campañas publicitarias especialmente entre la población urbana, "que muy a menudo provoca incendios por descuido e ignorancia".
Asimismo, la poblaciónrural que trabaja en estas áreas forestales debería "estar más implicada en la administración de las mismas y tener la oportunidad de beneficiarse económicamente de ello", según el citado trabajo.
Para ello, se requerirán técnicas de administración que concilien intereses conflictivos, tales como el pastoreo controlado en los bosques y que sean adaptables a las tierras públicas y privadas, señala la organización conservacionista.
También se necesitará "una colaboración estrecha entre las autoridaes forestales, agrícolas y de conservación de la naturaleza", añade Adena/WWF.
(SERVIMEDIA)
08 Jul 1991
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