Según informó la Policía, los agentes especiales asaltaron la vivienda y detuvieron a un individuo que había transportado el estupefaciente en una furgoneta a bordo de un ferry procedente de Tánger.

Además de la droga se han intervenido una prensa hidráulica, moldes para empaquetar hachís y dos vehículos de alta gama, así como un número elevado de teléfonos móviles, dinero en efectivo y un lanzadestellos policial.

Las investigaciones se iniciaron a primeros del presente mes cuando investigadores de la Jefatura Superior de Policía de Cataluña tuvieron conocimiento de la existencia de un grupo organizado de narcotraficantes asentado en las inmediaciones de Barcelona.

Al parecer, estaban a la espera de un importante cargamento de hachís que iba a ser transportado hasta el puerto de Barcelona a bordo de un ferry con origen en Tánger, oculto en el interior de una furgoneta.

Una vez que se tuvo constancia de la llegada del vehículo y con la pertinente autorización de la Fiscalía Especial Antidroga, se estableció un dispositivo de vigilancia en torno al vehículo y su ocupante, que condujo a los investigadores hasta un lujoso chalet de la localidad de Castelldefels.

Ante la dificultad que representaba la entrada al inmueble, debido a la amplia explanada que existía entre la casa y la vía pública, la entrada y registro fuera practicada por los Grupos de Operaciones Especiales (GOES) de la Policía Nacional. En su interior se localizaron 1.652 kilos de hachís.