“Nosotros no pensamos que no se pueda reformar la Constitución, aunque es verdad que no era la prioridad de esta legislatura”, comentó Alonso en los pasillos de la Cámara Baja después de que el Pleno rechazara ayer la solicitud del Parlamento de Cataluña para ceder las competencias a la Generalitat que le permitan convocar un referéndum de independencia.

Alonso recordó que la prioridad del PP en esta legislatura era el paro pero reconoció que existe una posibilidad de reformar la Constitución para buscar un encaje de todas las comunidades en el modelo territorial.

No obstante, advirtió de que para ello “hay que saber a dónde se quiere ir” y, sobre todo, “crear un clima de confianza” porque en los últimos meses ha habido “mucha confrontación” por el desafío independentista puesto en marcha por el presidente de la Generalitat, Artur Mas.

Alonso señaló que “la confianza es previa al diálogo” y, por lo tanto, para que pueda emprenderse un proceso de reforma de la Constitución es necesario que primero se recupere la confianza ente los interlocutores.