Con este plan se centra en el trabajo para transformar los residuos en recursos y usar materiales fabricados a partir de recursos sostenibles, intensificar la reducción del consumo energético disminuyendo el ratio de kWh por tonelada de producto, usar refrigerantes naturales y aplicar políticas de uso responsable de recursos hídricos.

Además, se compromete a actuar desde el origen de la materia prima, como la leche y otros ingredientes, con acciones que contribuyan a tener una cadena de valor sostenible, según informa en un comunicado de prensa.

Las medidas que se han puesto en marcha hasta el momento han permitido reducir en más de un 37 por ciento las emisiones totales del grupo entre 2007 y 2012. Por otra parte, la valoración de residuos ha alcanzado más del 95 por ciento de los residuos generados cada año.