Así lo afirmó este miércoles a los periodistas la directora general de Tráfico, María Seguí, en un receso del seminario ‘Alcohol y conducción. Trabajando por la tolerancia cero’, celebrado en Madrid y organizado por la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE).

La última reforma de la ley de tráfico, que entró en vigor el pasado 8 de mayo, incluye entre sus novedades que se podrá inmovilizar un vehículo si no dispone del sistema de retención infantil adecuado cuando viaje en él algún niño menor de 12 años.

Incumplir este precepto legal está considerado como una infracción grave, lo que lleva aparejado una sanción de 200 euros y tres puntos menos en el carné de conductor del vehículo, además de los gastos generados por la inmovilización del coche.

La última campaña puesta en marcha por la Dirección General de Tráfico (DGT) de intensificación de controles sobre el uso del cinturón de seguridad y los sistemas de retención infantil, en la semana del 8 al 14 de septiembre, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil detectaron a 377 menores de 12 años viajando en vehículos sin utilizar ningún dispositivo de seguridad.

“INAUDITO”

Seguí tildó de “inaudito” que siga habiendo casos de este tipo cuando “hace tiempo aprendimos que la única manera segura de transportar a un niño en el vehículo privado es a través de medidas de retención”.

Indicó que, dado que existe un grupo minoritario y “reticente” de padres, la DGT continuará poniendo en marcha “campañas de comunicación más directas y agresivas”.

A este respecto, Seguí subrayó que los agentes de la Guardia Civil cazaron “al menos una decena de casos” de vehículos con niños sin su sillita infantil por las carreteas españolas durante este verano.

“La mayoría de los padres, tutores y adultos llevan al niño adecuadamente retenido y así lo dicen las cifras, pero para este grupo de reticentes hay que buscar medidas especiales. En este caso, la inmovilización es una medida absolutamente relevante, pertinente y más que justificada. Parece inaudito que a día de hoy todavía haya quien no entienda que está la vida del niño en juego y también, por extensión, la de los otros ocupantes del vehículo cuando niño no está retenido”, concluyó.

Por su parte, el fiscal coordinador de Seguridad Vial, Bartolomé Vargas, indicó a los periodistas, en el seminario organizado por la CNAE, que “los menores de edad son un colectivo vulnerable en el tráfico diario y hay que tener con ellos toda clase de cuidados”.

Vargas apeló a insistir en la concienciación para evitar que siga habiendo menores que viajan sin sistemas de retención. “Es una cuestión de educación e implicar a los padres en esta materia”, subrayó, antes de añadir que “en algún caso puede haber responsabilidad penal” del padre o tutor, “pero la solución no son las normas punitivas, sino la educación”.