Así lo anunció la alcaldesa, Ana Botella, quien recalcó que los ingresos corrientes serán suficientes para pagar los gastos corrientes y las amortizaciones de la deuda.

Según dijo, todos los capítulos de servicios a los ciudadanos aumentan su cuantía, mientras que se reducen un 34% los gastos financieros por la deuda que ya ha amortizado el Consistorio, y cuyo volumen total se situará a finales del año que viene al nivel de finales de 2007.

Botella detalló que la inversión total entre la municipal y la de las empresas adjudicatarias de servicios públicos será de 345 millones. Además, en enero de 2015 los funcionarios municipales cobrarán una cuarta parte de la paga extraordinaria de 2012 que se les dejó de pagar como consecuencia del plan de ajuste.