Las empresas firmantes, pertenecientes a 20 sectores económicos y entre las que figuran Acciona e Iberdrola, operan en más de 150 países y generaron unos ingresos conjuntos de más de 1,2 billones de dólares en 2014.

Este grupo de compañías, cuyo acuerdo ha sido facilitado por el Foro Económico Mundial, considera que debe contribuir a dirigir la transición global hacia una economía baja en carbono y quiere ser catalizador de nuevas iniciativas para la reducción de emisiones.

La iniciativa, firmada por el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, y por el presidente de Acciona, José Manuel Entrecanales, cuenta con el respaldo de Accenture, Enel, Vestas, Veolia, GDF Suez, HSBC, IKEA, ING, Ericsson, Unilever, Toshiba o Schneider Electric, entre otros.

Galán, destacó que la iniciativa “representa un compromiso efectivo en la lucha contra el cambio climático”, ya que “como empresas, tenemos el deber de contribuir al desarrollo sostenible integrando plenamente la dimensión medioambiental en la estrategia y en la gestión de nuestras compañías”.

Las empresas firmantes de la carta asumen como compromisos la adopción de acciones voluntarias para reducir sus huellas de carbono, fijando objetivos de reducción de emisiones y colaborando a tal efecto con las cadenas de suministro

También al esarrollo de iniciativas dirigidas a elevar la concienciación de la opinión pública sobre las consecuencias del cambio climático, y a la gestión activa de los riesgos climáticos, incorporándolos a la toma de decisiones, y aprovechando al mismo tiempo las oportunidades de crecimiento que se presenten.

En 2014, Iberdrola redujo un 6% sus emisiones globales de CO2, al situarse en 212 gramos por kWh desde los 226 gramos por kilovatio hora registrados en 2013, según informó en una nota.