Paro. Más de 50 entidades católicas reivindican el trabajo decente

- Piden mirar "el dolor" que esconden los datos positivos de afiliación a la Seguridad Social

- Según la OIT, el 12,5% de los trabajadores españoles son pobres, por encima de la media europea

MADRID
SERVIMEDIA

Más de 50 entidades y personalidades católicas han firmado un documento para reivindicar que el trabajo decente pase “a la primera línea” de las políticas. Asimismo, piden "matizar" qué tipo de paro es el que está disminuyendo en las cifras que presenta el Gobierno. Según la OIT, el 12,5% de los trabajadores españoles son pobres.

"Hay una diferencia fundamental entre la macroeconomía y la microeconomía con la realidad concreta de la gente que está sufriendo en nuestra sociedad. Todo aumento del trabajo y de afiliación a la Seguridad Social bienvenidos sean, pero siempre desde una mirada crítica". "Habría que matizar qué tipo de paro es el que está disminuyendo" y ver "si tiene resultado evidente a nivel de la calle", dijo este martes José Luis Saborido, de la Confederación de Religiosos (Confer).

En esta línea, Javier Alonso, de Justicia y Paz, quiso llamar la atención sobre el tipo de "mirada" con el que se valoran los datos económicos. "Por supuesto un alza del número de personas afiliadas a la Seguridad Social es bueno, pero ¿cuántos no están afiliados?, ¿cuántas personas no están cotizando por las horas extraordinarias?, ¿cuántos trabajadores a tiempo parcial están cotizando por cuatro horas y están trabajando ocho horas diarias? Eso es un fraude a toda la sociedad", denunció, pidiendo "mirar el dolor que hay detrás de los números" como los presentados este martes por el Gobierno.

Confer y Justicia y Paz, junto a Cáritas, Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC), Juventud Estudiante Católica y Juventud Obrera Cristiana presentaron el manifiesto 'Iglesia unida por el trabajo decente', un documento para implantar un empleo con garantías y derechos como "meta prioritaria de las políticas públicas y de las organizaciones sociales, empresariales y sindicales", tanto en España como en todo el mundo.

"No podemos dejar sin respuesta el sufrimiento humano resultante tanto de estructuras injustas como del egoísmo de las personas que da lugar a formas de trabajo precario o mal remunerado, del tráfico de seres humanos y de trabajo forzado, de varias formas de desempleo juvenil y de migración forzada", denuncia el texto.

OBJETIVOS POST-2015

La presentación también contó con la asistencia de Joaquín Nieto, que, en representación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en España, agradeció a los firmantes ser pioneros en recoger el testigo de “humanizar” el trabajo.

Nieto recordó además que la propuesta de las organizaciones católicas, resultantes de una reunión entre entidades católicas y la OIT en el Vaticano hace un año, pretende incluir el trabajo decente en los objetivos de desarrollo sostenible de la agenda post-2015 (continuación de los Objetivos de Desarrollo del Milenio).

Para Nieto, estos nuevos objetivos suponen tres novedades, pues “no son sólo para los países en desarrollo”; se unifican en ellos decisiones ambientales y sociales (“no puede haber cohesión social en un planeta muerto”, denunció); e incorporan “de manera más profunda” la lucha contra la pobreza.

Por eso, según dijo, se podrá luchar también por ese 12,5% de trabajadores que en España son pobres, situación que afecta especialmente a los autónomos y a los contratados a tiempo parcial de forma "involuntaria". Ese porcentaje, subrayó, es superior al 9,5% de la media europea.

Nieto también denunció que en el mundo hay 400 millones de trabajadores que viven con menos de 1,5 dólares al día y que otros 450 millones lo hacen con menos de 2 dólares. Además, 204 millones de personas buscan un trabajo y no lo encuentran, de los que 75 millones son menores de 25 años.

Otros datos que comentó apuntan a que cada año se incorporan al mercado de trabajo entre 30 y 40 millones de personas, por lo que es necesario crear 500 millones de puestos de trabajo en la próxima década. Es más, según la OIT de los 7.000 millones de habitantes del planeta, 5.000 no tienen protección social y 200 millones de niños trabajan cuando, por su edad, no deberían hacerlo; sin contar los millones de personas que se ven explotadas en redes de trabajo forzoso.

El acto de presentación contó asimismo con la presencia de Charo Castelló, del Movimiento Mundial de Trabajadores Cristianos, que se encargó de leer el manifiesto, y Abraham Canales, de HOAC, que presentó a los ponentes.

(SERVIMEDIA)
05 Mayo 2015
AHP/caa