En cambio, Izquierda Unida y los partidos nacionalistas (PNV, CDC, ERC, BNG, CC, Compromís y Geroa Bai) se muestran reacios a que la Mesa del Congreso decida imponer una sanción a Cuadra y coinciden en señalar que su actitud, guste o no, se enmarca en la libertad de expresión que recoge el propio texto constituyente que el diputado de la formación abertzale rompió.

El pasado miércoles, durante su intervención en el Pleno, el diputado navarro arrancó las páginas de la norma fundamental referidas a la indisoluble unidad de España y a que el Ejército es el garante de este principio.

Después de su intervención, y una vez que estaba en su escaño, el presidente del Congreso, Jesús Posada, se limitó a amonestar verbalmente al diputado por el incidente, porque consideraba que arrancar varias páginas de la Constitución era algo “inadmisible y censurable”. No obstante, tras reconvenir a Cuadra, Posada señaló que consideraba el incidente “saldado”.

Sin embargo, el PP, el PSOE y UPyD, remitieron a Posada sendos escritos apelando a que se investigara si procedía alguna sanción, lo que llegó a la Mesa del Congreso a estudiar el caso en la reunión de este jueves.

A esos escritos iniciales se sumó uno del Grupo Mixto (de BNG, ERC, Geroa Bai, Compromís y Coalición Canaria) que pide que se considere las consecuencias de una posible sanción porque tal hecho supondría una “seria merma” del derecho a la libertad de expresión.

Posada ha afirmado en reiteradas ocasiones que la resolución final que él adopte será la que decida por “unanimidad” la Mesa (formada por PP y PSOE) en la reunión del próximo martes atendiendo al informe jurídico requerido y que, según PP y PSOE contempla la posibilidad de sanción, acto que ellos respaldan, si Cuadra no rectifica.