Cuadra, durante el debate para la reforma del Tribunal Constitucional celebrado este jueves, fue llamado tres veces al orden por Posada y, por lo tanto, expulsado de la tribuna. El miembro de Amaiur no se retractó de que hace dos semana rompiera las páginas de la Carta Magna referidas a la unidad de España y el papel del Ejército.

Acabado el debate, el parlamentario vasco señaló que, desde el primer momento, el objeto del “gesto” de romper unas páginas de la Constitución tenía como fin “reforzar un discurso político en relación a unos artículos” que aluden al carácter indisoluble de la soberanía española.

LIBERTAD DE EXPRESIÓN

“En modo alguno era nuestra intención faltar a nadie ni realizar ningún tipo de ofensa, porque esto está contemplado dentro del ejercicio normal de la libertad de expresión”, apuntó para explicar que finalmente no se reunirá con Posada esta mañana, ya que el presidente considera que son suficientes las palabras del diputado de Amaiur.

El próximo paso será que Posada comunicará el próximo lunes a la Mesa del Congreso que Cuadra no se retracta, por lo que se aplicará lo que este órgano concluyó el pasado martes. La Mesa solicitaba a Cuadra que retirase lo que consideraba una ofensa, “advirtiéndole de que si no fuese así, la Mesa apoyaría la adopción de las más severas medidas disciplinarias previstas por el Reglamento”.

No obstante, el Reglamento de la Cámara no especifica cuáles serían esas medidas más allá de la suspensión de Cuadra en su condición de diputado, aunque podría agravarse la mencionada sanción después de que este jueves fuera expulsado de la tribuna.