El juez no acordó ninguna medida cautelar después de la declaración, que se desarrolló por espacio de 10 minutos. El magistrado preguntó al edil si conocía la identidad de la persona que colgó la pancarta. “Yo, como alcalde, no lo sé y creo que no tiene mucho sentido esta imputación”, dijo, que consideró “una forma de faltar al respeto a un pueblo entero”.

Tras considerar que este proceso “no tiene ningún recorrido”, explicó que una pancarta muy similar se ha venido colgando del balcón del Ayuntamiento de Tafalla en las fiestas durante los últimos 15 años, bajo gobiernos municipales de UPN o del PSN, y sólo ahora que el alcalde es de EH Bildu “hay motivo para hacer una imputación muy grave”.

Goldaracena reclamó respeto para lo decidido por el pueblo de Tafalla mayoritariamente y “no ir con venganzas” en forma de procedimiento judicial. “No tiene ningún tipo de fundamento esta imputación. Pedir el fin de la dispersión será opinable, pero en ningún caso supone un delito”, dijo convencido.

El magistrado le imputa indiciariamente un delito de enaltecimiento del terrorismo por estos hechos, que se produjeron el pasado 14 de agosto, con motivo de la celebración de las fiestas patronales de la localidad.

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 3 admitió a trámite una denuncia presentada por la Fiscalía en la que se le acusaba de "tergiversar el uso del lenguaje, dando a entender que la situación procesal y penal" de los presos es "injusta".

El Ministerio Público acusó a Goldaracena por ser la "máxima autoridad" de la corporación local y autorizar la colocación en la fachada del consistorio de una pancarta en la que se podía leer en euskera 'Preso ta iheslari politoak Etxera!' (¡Presos y refugiados políticos a casa!).

EH Bildu ha denunciado el "sinsentido" de la imputación, que "evidencia", según la coalición, "el nerviosismo e inquietud que ha generado el cambio político en Navarra".