En declaraciones a Servimedia, Núñez Morgades concretó que es crucial transmitir “unos valores que son de todos, de derechas y de izquierdas, porque el menor no tiene color político”. “Todos coincidimos en proteger y amparar al menor en este momento en el que se han dictado nuevas leyes que son un reto, pues son definitorias del interés superior del menor y amplían y apoyan la protección del menor, especialmente a aquellos menores vulnerables, como los que tienen discapacidad”, añadió en referencia a la nueva Ley de Infancia.

“Si no se aplican coordinadamente a través de ese pacto, y luego en el día a día a través de los servicios sociales, de atención educativa y sanitaria, no lograremos sacar la riqueza de una ley que ha tenido un amplio consenso”, advirtió.

Núñez Morgades ha sido una de las nuevas incorporaciones como patrono a la organización, a la que también se ha sumado la que fuera vicepresidenta de Costa Rica, Rebeca Grynspan. El español siempre ha estado vinculado a las políticas de infancia y, entre otras funciones, fue Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid (2001-2006).

INVERSIÓN SOCIAL

A dos meses de las elecciones generales, considera que “es el momento idóneo” para dejar de lado los intereses y reflexionar sobre la necesidad de “hacer una inversión social si queremos lo mejor para nuestros hijos”.

Además de ese pacto educativo, entre las muchas cuestiones pendientes que deben abordarse Núñez Morgades enumeró medidas de apoyo a la familia y a la conciliación, evitar la discriminación de las mujeres en edad fértil en el mercado laboral y aumentar la media de 1,39 hijos por mujer, “que está dando al traste con todo, como se ve en la propia curva de longevidad”.

Los malos tratos y romper con la “barrera digital entre generaciones” son otras de las preocupaciones del nuevo patrono, que reclama “mucho más” presupuesto para la infancia. En su opinión, esos fondos deberían revertir en la familia, el “primer lugar” “donde el menor debería encontrar la felicidad”, con las “profundas modificaciones” que propone el Plan de Familia “para que la ayuda sea eficaz”, cambios que deberían fomentar la responsabilidad social corporativa a favor de las familias y llevar a España al porcentaje medio mundial de población infantil, pues mientras a nivel internacional los niños suponen un 36% de la población, en España apenas alcanza el 17%.

“Los niños sí interesan, pero no puede ser esta falta de norte de la política y esta realidad endogámica frente a una sociedad escéptica con la política”, concluyó.