Con los ojos cubiertos con un antifaz, y acompañados por un guía como si fueran alguno de los visitantes ciegos que acuden a diario al Museo Tiflológico, los participantes en el acto, en este caso un grupo de periodistas, han tenido ocasión de percibir de manera táctil, es decir recorriéndolas con sus propios dedos, algunas de las obras expuestas en el mismo.

La colección de este espacio cultural accesible de la ONCE, sito en el número 18 de la madrileña calle de La Coruña, junto al metro de Estrecho, incluye detalladas reproducciones a escala de importantes monumentos nacionales e internacionales como las Cuevas de Altamira, la Dama de Elche, el Acueducto de Segovia, la Alhambra, la Puerta de Alcalá, el Partenón, la Torre de Pisa, la Torre Eiffel, o el Taj Mahal. También pueden verse y tocarse en él esculturas como el busto de Goya que se entrega cada año en los premios del cine español, y obras de arte realizadas por artistas ciegos.

“No son meras reproducciones, sino elementos desarrollados desde una perspectiva artística con materiales muy cuidados”, explica María José Sánchez Lorenzo, coordinadora del Museo Tiflológico. Alguna de ellas “incluyen aromas que transmiten sensaciones, como el plano de Jerusalén”, agrega Sánchez Lorenzo

PARA TODOS LOS PÚBLICOS

Este espacio accesible a todos los públicos fue inaugurado en 1992, y en él los sentidos del tacto y el oído tienen un papel protagonista a la hora de admirar sus obras, junto al tradicional de la vista. “El museo se hizo para que las personas ciegas pudiéramos conocer los elementos artísticos principales del ámbito nacional e internacional, pero este objetivo se extendió para que el público en general pudiera disfrutar de estos elementos”, señala la coordinadora del museo.

En sus salas, 12.000 visitantes cada año tienen ocasión de ver cuatro colecciones: la de maquetas de monumentos arquitectónicos (permanente), la de obras de artistas con discapacidad visual grave (exposiciones temporales), la de material tiflológico, con una muestra de los sistemas de escritura, anteriores o contemporáneos al Braille, la mecanización de este sistema y su aplicación a los distintos campos de la enseñanza (lectoescritura, matemáticas, música) y de las artes industriales (máquinas para la impresión, mecanografía, taquigrafía o calculadoras).

“Vienen muchas personas que no son afiliadas a la ONCE y que quieren conocer las maquetas para conocer la historia del arte. También recibimos grupos de quinto y sexto de Primaria, de la ESO, de Bachillerato y Formación Profesional que acuden para conocer el museo como una forma de aprender", señala Sánchez Lorenzo.

NOVEDADES

El pasado mes de septiembre, se incorporó a la sala de monumentos la réplica de la Catedral-Basílica Nuestra Señora del Pilar realizada por Enrique Ángel Sanz Barrado, de Maquetas Arsanz, a petición de la ONCE y en colaboración con la entidad financiera Ibercaja, y hasta el próximo 21 de noviembre puede verse una muestra temporal del escultor Cesar Osorio, bajo el título 'Sueño. Homenaje póstumo a mi madre', formada por 14 obras.

“El próximo 10 de diciembre inauguraremos una nueva exposición temporal que recopilará obras sobre temática de naturaleza de pintores y fotógrafos con discapacidad visual”, adelanta la coordinadora del museo.

Artistas afiliados a la ONCE como los fotógrafos Javier Torre, Marcelo Bilevich o Carme Ollé; los pintores Ataulfo Casado, José Ramón Argelés o José Miguel González; y el escultor sordociego José María Prieto Lago, han mostrado su obra en el Tiflológico. El museo también ha expuesto piezas de artistas sin discapacidad como Lorenzo Quinn, Santiago de Santiago, Enrique Pérez Comendados, Higinio Vázquez o Maria José Cabrerizo.

La ONCE dedica al Museo Tiflológico el cupón este sábado, 7 de noviembre. Cinco millones y medio de cupones llevarán por toda España la imagen de este singular espacio cultural plasmada en la Dama de Elche, una de las reproducciones de su colección.