El informe, en el que se ha entrevistado a 20 expertos de compañías del sector de las Tecnologías de la Información, ha contado además con las aportaciones de ocho casos de emprendimiento de éxito y 278 iniciativas emprendedoras del sector TIC promovidas en el seno de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM).

El tamaño del equipo y la diversidad son dos puntos importantes de cara al éxito final del proyecto. El 77,9% de los equipos que se quedan en la primera fase, la de la idea, están formados por grupos de uno a tres emprendedores, por lo que se podría decir que los equipos más exitosos son los más numerosos.

Pero el equilibrio entre conocimientos técnicos y de gestión también contribuye a que el proyecto culmine triunfalmente. De hecho, el 73,5% de las ideas se quedan en las fases iniciales al desequilibrar la balanza a favor de la formación tecnológica, en detrimento del desarrollo de un buen plan de negocio.

También las ideas que analizan el mercado desde el inicio muestran mejores perspectivas de evolución, porque ahí es donde las empresas son capaces de identificar la oportunidad. Si además esos proyectos emprendedores cuentan con un prototipo desde el primer momento, hay una mayor probabilidad de lograr el triunfo. El número de ideas que se llegan a constituir y que cuentan con un prototipo es casi el doble que el número de proyectos que no cuentan con uno, un 62,5% frente a un 33,54%.

Pero este estudio se completa además con el análisis de ocho estudios de caso de empresas tecnológicas nacidas en el ámbito de la Universidad Politécnica de Madrid, tanto promovidas por antiguos alumnos o profesores como surgidas del programa de creación de empresas de la universidad.