Según informó hoy la Policía en un comunicado, el valor de mercado de las 10 toneladas de polvo de platino recuperadas podría superar los 600.000 euros.

Los tres ladrones, que han sido detenidos, están acusados de robo con violencia e intimidación y detención ilegal.

La investigación comenzó a finales de octubre, cuando los agentes tuvieron conocimiento del robo de un camión en el kilómetro 26 de la carretera M-50, con 41 bidones de polvo de catalizador.

Los delincuentes, que se hicieron pasar por guardias civiles, pararon el camión y procedieron a la detención ilegal de su conductor durante varias horas, hasta que fue liberado en una estación de servicio de Leganés.

Los agentes localizaron el camión sin la carga. Las pesquisas apuntaban a la localidad toledana de Borox, en la que hallaron una finca donde podría estar almacenada la mercancía.

En paralelo, los policías identificaron a una persona que vendía polvo de catalizador en pequeñas cantidades para no levantar sospechas y que intentó vender la sustancia a un trabajador de la propia empresa que había sufrido el robo.

Asimismo, los agentes averiguaron que el individuo iba a vender 100 kilogramos del material, por lo que establecieron un dispositivo para detenerle el 20 de noviembre. Registraron su domicilio y una finca, en la que hallaron más de 40 bidones metálicos similares a los del camión interceptado y se incautaron de unas 1.650 tarjetas de telefonía de una conocida compañía. El detenido fue puesto a disposición judicial y se ordenó su ingreso en prisión.

Posteriormente, los agentes arrestaron a otros dos individuos. Uno de ellos está implicado presuntamente en la intermediación para la venta de 500 kilogramos de polvo de catalizador con destino a Rumanía. El otro está acusado de ser presunto autor material de la sustracción del camión con su conductor. Ambos tienen antecedentes por hechos de la misma naturaleza.