Violencia género. Las familias insisten en que los mediadores no deben ser “cómplices” de los maltratadores

- Defienden el interés superior del menor y de la persona con discapacidad y consolidar el 21 de enero como Día Europeo de la Mediación Familiar

MADRID
SERVIMEDIA

La Unión de Asociaciones Familiares (Unaf) recomienda a los mediadores sociales que no realicen su trabajo en contextos de violencia de género, pues en su opinión hay una “incompatibilidad absoluta y taxativa para desarrollar” ese servicio, a pesar de que “desde algunos sectores se promueve”.

Así lo afirma la organización en las recomendaciones que hace en la 'Valoración sobre la mediación familiar en España', un documento hecho público este jueves 21 de enero, Día Europeo de la Mediación Familiar, una fecha que piden "consolidar".

“La persona mediadora no puede permitir que una de las partes se vea intimidada o coaccionada. Por eso consideramos fundamental la formación de las personas profesionales de la mediación en violencia y en particular en violencia de género”, una lacra “arraigada” en la sociedad patriarcal que, según la Unaf, se podría combatir con formación.

“Si no es con formación, la persona mediadora puede pasar por alto señales evidentes del desequilibrio mencionado y no tomar las medidas oportunas para proteger a una víctima”, indica. Además, añade, “si no se detecta la situación de violencia, se es de alguna manera cómplice para mantener esa situación dejando a un lado la responsabilidad social para la erradicación de este problema”.

En este documento las organizaciones familiares también se detienen en otro colectivo especialmente vulnerable como es el de las personas con discapacidad. “De forma generalizada en la regulación y formación en mediadores” observan “escasas referencias a las personas con discapacidad y/o en situación de dependencia”, sin atender a sus “peculiaridades”.

Por ello, subrayan el interés superior de las personas con discapacidad en los acuerdos que se alcancen durante los procesos de mediación, interés comparable al caso de los menores en el ámbito de la violencia de género.

Finalmente, el informe también sirve de altavoz para reivindicar que la mediación sea un servicio “público, gratuito y extrajudicial”, que se homologue la profesión con una asociación profesional, que se unifiquen criterios para la formación de estos profesionales y que se valore la experiencia en la resolución de conflictos familiares.

(SERVIMEDIA)
21 Ene 2016
AHP/caa