Investidura. Sánchez y Rivera se comprometen a un plan de emergencia social de 7.000 millones

MADRID
SERVIMEDIA

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, tienen como “prioridad” de gobierno un Plan de Emergencia Social para ofrecer a las personas “mecanismos” para que puedan salir de la pobreza de manera “permanente”. Dicho plan de choque distribuirá 7.000 millones de euros para un 'Ingreso Mínimo Vital' y un 'Complemento Salarial Garantizado'.

Así lo recoge el documento ‘Acuerdo para un gobierno reformista y de progreso’ que ambos firmaron este miércoles en el Congreso para combatir la exclusión social, la pobreza laboral y la pobreza infantil.

Dicho plan pasa por reconocer en la Ley General de la Seguridad Social un Ingreso Mínimo Vital como prestación no contributiva para atender la situación de necesidad de las familias que carecen de ingresos, que irá acompañada de un itinerario de activación laboral y formación, adaptado a la situación personal y familiar. También se incrementará la prestación por hijo a cargo.

El complemento Salarial Garantizado (CSG) tendrá naturaleza de crédito fiscal e irá para los hogares con rentas más bajas. Este complemento variará también en función de la situación familiar de los perceptores (solteros, pareja, número de hijos).

Además, PSOE y Ciudadanos se comprometen a dotar de recursos “suficientes” al Plan Integral de Inclusión Social y a elaborar una estrategia para la inclusión de personas sin hogar.

El documento también se refiere a impulsar medidas de lucha contra la pobreza energética, contra el sobreendeudamiento y los desahucios.

PETICIÓN DEL TERCER SECTOR

En una reciente entrevista con Servimedia, Luciano Poyato, presidente de la Plataforma del Tercer Sector, revindicó un plan de lucha contra la pobreza que fomente políticas de empleo para personas en riesgo de exclusión. Su propuesta consiste en destinar 7.000 millones de euros en la próxima legislatura para crear hasta 915.000 puestos de trabajo. Según afirmó, estos empleos supondrían bajar notablemente los casi cinco millones de desempleados actuales y restaría entre tres y cuatro puntos de una tasa de desempleo que supera el 20%.

Poyato explicó que no se trata de una política "de mantenimiento de unos mínimos de calidad de vida, sino de fomentar la empleabilidad". "Aplicando el plan pueden bajar hasta cuatro puntos en el desempleo en España en cuatro años. No es poco”, agregó.

(SERVIMEDIA)
24 Feb 2016
AHP/caa