Estas dos plantas eran propiedad de Bow Power, filial también del Grupo ACS y de Global Infrastructure Partners. La adquisición, que fue aprobada por el Consejo de Administración de Saeta Yield el pasado 25 de febrero, estaba condicionada a la firma de la compraventa, según explicó este martes la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Las dos plantas termosolares, con tecnología de cilindro parabólico, cuentan con 49,9 megavatios (MW) de potencia instalada cada una, anexas a Extresol 1, una planta que forma parte de la cartera de activos del grupo.

Las plantas en 2015 registraron conjuntamente 78 millones de euros de ingresos y 53 millones de resultado bruto de explotación (Ebitda).

En términos recurrentes ordinarios, el flujo de caja disponible para su distribución (CAFD), antes de la financiación de la compra, ascenderá a 12,5 millones, lo que supone un ‘cash yield’ de la transacción en el entorno del 10,5%.

Tras la adquisición, el CAFD recurrente esperado de Saeta Yield asciende a 68,2 millones de euros después de la asignación proporcional de los costes de financiación de la compra, y el dividendo de la compañía aumenta un 7,7% hasta los 61,4 millones al año.

El primer pago prorrateado de este dividendo se realizará conforme a la política de dividendos de la compañía, en torno a 60 días después del cierre del primer trimestre de 2016.

Saeta Yield explicó, además, que mantiene sus compromisos de crecimiento basados en la adquisición de activos de Bow Power y ACS, así como la adquisición de activos de terceros.