SEO/BirdLife, Ecologistas en Acción, Greenpeace, WWF y Amigos de la Tierra lanzaron esta advertencia en una rueda de prensa convocada tras la aceptación parcial, por parte del Tribunal Supremo, del recurso contra el real decreto que regula el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras, aprobado en 2011.

Montserrat Vilà, investigadora de la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC), afirmó que “las especies exóticas invasoras suponen una amenaza para nuestra biodiversidad por los impactos que causan sobre las especies nativas por depredación, competencia o hibridación, entre otros”, provocando que “cada vez será más difícil encontrar ecosistemas con especies propias”.

Por su parte, Benigno Elvira, experto en peces y profesor de la Universidad Complutense de Madrid, destacó que “la presencia generalizada de especies exóticas en nuestros ríos y humedales es una de las principales causas por las que el 37% de especies autóctonas de peces están amenazadas”.

Además, el biólogo investigador del CSIC en el Jardín Botánico de Madrid Pablo Vargas señaló que “las especies exóticas invasoras no sólo provocan impactos ambientales, sino que también ocasionan importantes daños económicos y de salud pública”, pero “estamos en un país que planifica tarde e incluso, cuando las predicciones son aplastantes, prefiere mirar a otro lado como en este caso o en el del cambio climático”.

DAÑOS DE 12.000 MILLONES

La directora ejecutiva de SEO/BirdLife, Asunción Ruiz, recordó que, “además de ser un problema para la biodiversidad y conservación del medio ambiente, las especies exóticas invasoras generan un impacto económico brutal”, ya que “provocan daños de 12.000 millones de euros al año a la Unión Europea”.

Asimismo, el coordinador de Ecologistas en Acción, Theo Oberhuber, criticó que al Partido Popular y al PSOE “les importa más tener cuatro votos que las consecuencias ambientales y económicas que tienen las especies invasoras”, y defendió que “ninguna actividad económica tiene la capacidad de estar por encima del medio ambiente, por muy rentable que sea”.

Por último, los representantes ecologistas aclararon que no quieren empezar una guerra con los profesionales de la caza y de la pesca, porque "los necesitamos" y, además, “pueden llegar a ser claves en la lucha contra las especies invasoras” si "trabajamos conjuntamente".