Según informó AUME, este “grupo de servidores públicos, que constituye el grueso de las Fuerzas Armadas y es el auténtico soporte operativo de las mismas”, afrontará “situaciones de suma gravedad” como la obligatoriedad de abandonar el servicio al cumplir los 45 años, “sin expectativas laborales alternativas”.

AUME subrayó su compromiso con la “plena profesionalización con alternativas claras para la adquisición de la condición de militar de carrera”, al tiempo que denunció el “incumplimiento del Gobierno” del mandato establecido en el artículo 32.3 de la Ley Orgánica de Derechos y Deberes de los miembros de las Fuerzas Armadas y el artículo 21 de la Ley de Tropa y Marinería.

En estos preceptos se establece la “obligación” del Ministerio de Defensa de facilitar los medios necesarios de orientación, impulso y apoyo para su plena incorporación al mundo laboral al término del compromiso con las Fuerzas Armadas y el ofrecimiento de programas de incorporación a otros ámbitos laborales a partir del empleo, titulaciones, años de servicio e interés profesional.

“La situación es de gran incertidumbre, desesperación y desamparo de miles de militares y de sus familias. La solución ha de llegar de manera urgente e inmediata”, remachó AUME.