En su intervención ante la Junta Directiva Nacional del PP, Rajoy exigió al Ejecutivo de Zapatero que no permita que "el acceso de las franquicias de ETA a las próximas elecciones" ni vuelva a abrir escenarios de diálogo con los terroristas.

Afirmó que, para acabar con la violencia, "no se paga precio político" a los asesinos y "se combate con todos los instrumentos del Estado de Derecho" a la banda terrorista.

En este sentido, celebró los dos recientes acuerdos con el Gobierno para aprobar la nueva Ley de Víctimas y reformar la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (Loreg) con el fin de "hacer imposible el acceso de las franquicias de ETA a las próximas elecciones".

Apuntó que la presencia o anulación de las listas que presenten los terroristas a las elecciones municipales será "el termómetro de la voluntad del Gobierno, igual que la creación de empleo es el termómetro de la política económica".

Finalmente, Rajoy expresó su "apoyo y respaldo" a las víctimas del terrorismo e insistió en que los terroristas no se pueden presentar a las elecciones bajo ningún concepto.