Según informaron fuentes de la Junta de Castilla y León, el fuego se mantiene en el nivel 1 de gravedad potencial. Se trata del siniestro de mayor calado que registra la comunidad en lo que va de verano.

En la zona trabajan aproximadamente una decena de técnicos y agentes medioambientales y seis helicópteros de las bases de El Maíllo, El Bodón, Guadamiro, Villarralbo y Pinofranqueado.

Además, ha sido necesaria la presencia de dos aviones anfibios de Matacán, tres autobombas, un bulldozer, dos brigadas de investigación de incendios y seis cuadrillas de tierra, así como bomberos de la Diputación de Salamanca y dotaciones de la Guardia Civil.

En cuanto al origen del fuego, las mismas fuentes señalan que "se baraja que sea intencionado".

Según los últimos datos de la Dirección General de Protección Civil y Emergencias, este lunes se han registrado y controlado otros incendios en Alcubierre (Huesca); en Las Peñas de Riglos (Huesca); en Moya (Las Palmas), que afecta a una superficie de 4,5 hectáreas; en Lagartera (Toledo), que ha quemado 26 hectáreas; en Tornadizos de Ávila (Ávila), que afecta a cinco hectáreas; en Cartelle (Orense); en Santa Margalida (Mallorca) y en Murcia.