El titular de la central (Centrales Nucleares Almaraz-Trillo, participada mayoritariamente por Iberdrola, Endesa y Gas Natural Fenosa) comunicó al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), siguiendo el procedimiento reglamentario, que su decisión se debe al aumento del caudal de vapor que dicha válvula vierte hacia el depósito de alivio del presionador hasta un nivel de 70 litros por hora, por debajo de los 2.271 litros por hora establecidos en las Especificaciones Técnicas de Funcionamiento.

El titular está analizando las causas del suceso y procederá a reparar la válvula una vez que la central se desconecte de la red. Según su información, todos los sistemas de seguridad han funcionado correctamente y el suceso no ha tenido repercusión para los trabajadores, la población ni el medio ambiente, clasificándose provisionalmente como nivel 0 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares (INES).