En concreto, Extremadura ha registrado un aumento del 111,1% de la siniestralidad mortal, con 19 víctimas entre enero y juio de 2002, frente a las 9 del mismo periodo del año anterior.

En el caso de Asturias se ha pasado de 13 a 26 muertos en accidentes de trabajo, lo que supone una subida del 100%, mientras que en Castilla-La Mancha el incremento es del 80%, al pasar de 20 a 36 víctimas.

Tras estas comunidades aparecen La Rioja, con un incremento de la siniestralidad mortal del 66,7%, y Canarias, con una subida del 62,5%.

Por el contrario, los mayores descensos se produjeron en Baleares, donde se ha pasado de3 a 2 víctimas mortales (-84,6%), y Galicia, con una caída del 15,9% y 53 muertos, frente a los 63 del año anterior.

En cifras absolutas, es Cataluña la que registra más víctimas, con 118 muertos de enero a julio, seguida de Andalucía, con 94; Comunidad de Madrid, con 71, y Castilla y León, con 58.