Lo hizo a través de un comunicado en el que manifestó su preocupación por “la escalada de violencia” en Gaza e Israel y por la seguridad de sus equipos sobre el terreno, en su mayoría conformado por población local, y sus familias.

Confirmó que ninguno de sus trabajadores ha resultado herido, aunque varios de ellos se han visto obligados a abandonar sus hogares por encontrarse en “zonas señaladas como objetivo militar”.

Ante esta situación, la responsable de Acción contra el Hambre para Oriente Medio, Chiara Saccardi, recalcó que están "monitoreando de cerca la situación y trabajando a todos los niveles para reubicar a nuestros compañeros, compañeras y sus familiares a zonas más seguras”.

Del mismo modo, reseñó que la organización está haciendo “todo lo posible” para “reducir su vulnerabilidad y garantizar que pueden acceder a comida, bebida y electricidad”.

Por todo ello, Chiara Saccardi avanzó que Acción contra el Hambre ha suspendido temporalmente sus actividades en Gaza debido a la “situación de inseguridad” y para “reducir riesgos”.

En ese sentido, dejó claro que “los equipos están en alerta para poder volver a trabajar en nuestros programas humanitarios en cuanto la situación lo permita”.

Por último, Acción contra el Hambre atestiguó que el “bloqueo total” a Gaza anunciado por Israel “va en contra del derecho humanitario” al suponer el impedimento de la llegada de combustible, agua y alimentos a la población civil.