Greenpeace inició acciones legales contra Esperanza Aguirre como consencuencia de unas declaraciones que realizó la concejala, en las que acusaba a los ecologistas de financiar a los grupos que se oponen a la incineradora de Valdemingómez.

Según la organización conservacionista, Esperanza Aguirre "pretende con declaraciones de este tipo desviar la atención sobre la gestión de las basuras que realiza el Ayuntamiento de Madrid".

Asimismo, denunció que "utilizar un cargo público como a Concejalía del ayuntamiento para intentar desacreditar a una organización no gubernamental, realizando declaraciones que son falsas, es inaceptable".

Para Juan López de Uralde, portavoz de la organización ecologista, manifestó que "las declaraciones de Esperanza Aguirre contra Greenpeace demuestran que el ayutamiento se ha quedado sin otros argumentos para defender su planta incineradora que la descalificación sin fundamento".