Así se refleja en los resultados publicados este miércoles por la compañía, que indican un volumen de ventas de 92 millones de euros, un 39,5% más que en el ejercicio anterior.

La compañía situó su resultado operativo (Ebitda) en positivo, con 0,4 millones de euros, tras incrementar su margen en un 68%, mientras que el margen sobre ventas alcanzó un 56%, batiendo el margen bruto del último ejercicio prepandemia (2019/20).

La compañía destacó que en el segundo semestre del ejercicio registró un beneficio de 1,5 millones de euros, por encima del obtenido en el mismo periodo de 2019/20.

En todo el ejercicio, las ventas online aportaron un 14% a los ingresos de la compañía, tras crecer un 20% sobre el ejercicio anterior a la pandemia y un 218% desde que la firma inició su transformación en 2016/17.

La firma creció en número de tiendas en este ejercicio hasta alcanzar 348 puntos de venta, tras abrir 24 nuevas tiendas (tres en España y 21 en otros cuatro países), y cuenta con el 53% de sus tiendas fuera de España.

En concreto, las aperturas se centraron sobre todo en el mercado mexicano, el segundo más importante para el grupo tras España, con 17 nuevas tiendas.

El nuevo consejero delegado de la compañía, Antonio Puente, destacó que “en el segundo semestre del ejercicio, ya con menos restricciones por la pandemia, la compañía ha recuperado su rentabilidad, obteniendo un resultado neto atribuido positivo, incluso superior al del segundo semestre del último ejercicio prepandemia”.

NOMBRAMIENTO

Por otro lado, la compañía informó de que su Consejo de Administración acordó ayer, por unanimidad, proponer a la Junta de Accionistas el nombramiento de Antonio Puente como consejero ejecutivo, estando previsto que, una vez nombrado consejero, sea designado como consejero delegado.

El nombramiento refuerza el equipo de dirección y a Adriana Domínguez como presidenta ejecutiva, presidenta del consejo y máxima responsable de la compañía.

Puente se incorporó a la firma de moda de autor en 2015, primero como director financiero en la filial de la compañía en Japón y después como director de la filial japonesa. En 2016 inició su trayectoria en los servicios centrales de la compañía en Ourense como director de control de gestión del grupo. Ya con Adriana Domínguez al frente de la empresa, fue ascendido primero a director de operaciones (octubre 2017-febrero 2019) y posteriormente a director general.