Lo hizo a través de un comunicado emitido con motivo de la conmemoración del Día Internacional contra el Trabajo Infantil en el que atestiguó que “el compromiso y la colaboración estratégica” de la Cooperación Española ha jugado un “papel clave en la lucha contra el trabajo infantil en la región” mediante la Iniciativa Regional América Latina y el Caribe Libre de Trabajo infantil, que engloba a 31 gobiernos, sindicatos y organizaciones empresariales de la zona con el objetivo de “lograr la primera generación libre de trabajo infantil en la región”.

A pesar del descenso de las cifras de trabajo infantil, la Aecid refrendó que “la situación dista mucho de ser ideal”, como lo ponen de manifiesto las cifras de la OIT y Unicef, que calculan que en la región hay más de ocho millones de menores en esta situación, de los cuales alrededor de seis millones se encuentran desarrollando empleos peligrosos, una tendencia a la que ha contribuido la pandemia.

La Aecid presta su apoyo a la supradicha Iniciativa Regional América Latina y el Caribe Libre de Trabajo infantil a través del Programa Regional de Aceleración (Praeti), una iniciativa a partir de la que “se redoblan esfuerzos para retomar el camino hacia la reducción del trabajo infantil y reafirmar el compromiso para erradicarlo en la región”.

La Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo aseveró que el trabajo infantil “interpela y evidencia un problema social que obstaculiza el desarrollo y viola los derechos humanos”, y añadió que su “erradicación está a nuestro alcance y tiene un impacto significativo en la reducción de la desigualdad, la informalidad laboral, la mejora de la calidad educativa y la generación de empleos decentes para lograr la inclusión social”.

A su juicio, “acelerando el paso”, América Latina y el Caribe está en condiciones de alcanzar la meta 8.7 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que compromete la erradicación del trabajo infantil en todas sus formas para 2025.

Por todo ello, y luego de reiterar su compromiso con la erradicación del trabajo infantil en América Latina y el Caribe, reivindicó que la mejora de la situación en la región “no hubiera sido posible sin el compromiso duradero, la visión estratégica, la colaboración y la flexibilidad de España”.