Así lo indicó durante su comparecencia en la Comisión de Hacienda y Función Pública del Congreso de los Diputados para informar sobre los datos de recaudación de 2021, ya presentados la semana pasada por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.

Al inicio de su intervención, Gascón recordó que los ingresos gestionados por la Agencia Tributaria cerraron 2021 en 223.382 millones de euros, un 15,1% más sobre 2020, año afectado por la pandemia de covid-19, y un 5% más que en 2019, de forma que, aunque la economía española aún no ha alcanzado los niveles de 2019, en términos de recaudación sí “se alcanzaron con creces”, superando además en 1.275 millones de euros la previsión de ingresos incluida en los Presupuestos Generales del Estado (PGE).

De esta forma, el gran aumento de ingresos de 2021, prolongado en los dos primeros meses de 2022 con un incremento del 20% respecto al mismo periodo del año anterior, hace que, según explicó Gascón, solo sea necesario un crecimiento del 4% respecto a 2021 para cumplir la previsión de 2022.

Por ello, el director de la AEAT afirmó que, pese a la gran incertidumbre actual y la dificultad para hacer previsiones, tras el arranque “muy positivo” durante los primeros meses de 2022, se podrá alcanzar “sin muchos problemas” la previsión recaudatoria de este año incluso “aunque la situación económica pueda empeorar”. “Soy optimista en cuanto al cumplimiento de las previsiones de ingresos porque ya llevamos mucho ganado, pero es muy aventurado hacer un pronóstico”, agregó al respecto, para reiterar que “el arranque ha sido bastante bueno”.

En este sentido, Gascón explicó que el crecimiento del 20% en los dos primeros meses del año se debe, por un lado, a que “todavía estamos reflejando actividad del 2021”, ya que en el inicio de 2022 se contabilizan los impuestos pagados por las pymes en el cuarto trimestre del año, por las grandes empresas en diciembre, y también el último mes de IVA, mes afectado por una alta inflación. Asimismo, apuntó que los primeros meses de 2021 “no fueron los mejores” debido al impacto de la pandemia y a la borrasca Filomena. Por ello, pese a considerar “espectacular” el dato, recomendó “ponerlo en cuarentena”.

Además, adelantó que los datos de marzo “van a ser buenos”, para a continuación advertir que “a partir de ahí entramos en un terreno de incertidumbre”, por lo que “las estimaciones hay que hacerlas con muchísima precaución”, ya que la coyuntura actual es “extraordinariamente complicada”.

2021

Sobre la buena evolución de los impuestos en 2021, explicó que no se debió a la alta inflación, ya que dicho efecto se refleja en el inicio de 2022, sino que estuvo basado en la “clara recuperación del empleo, a incrementos salariales y mejoras en las pensiones”, así como a una “clarísimas recuperación de los rendimientos de las actividades económicas”, especialmente de las pymes, ya que habían caído más en 2020 que las grandes empresas.

En esta línea, también descartó que el gran incremento de los ingresos se debiera a una subida de impuestos, ya que, detalló, las medidas impositivas en este sentido proporcionaron 1.462 millones de euros adicionales de recaudación, cifra inferior a la prevista, mientras que las medidas de rebajas impositivas redujeron la recaudación en 2.392 millones de euros, dejando un balance de 930 millones de euros ingresados menos.

Por otra parte, Gascón también expresó su “satisfacción” por el hecho de que la evolución del cumplimiento voluntario por parte de los contribuyentes y las empresas “está siguiendo un comportamiento muy positivo en los últimos seis años”, haciendo que “las bases imponibles fiscales esté creciendo bastante más que las principales magnitudes macroeconómicas”. Así, atribuyó “el mérito” a la ciudadanía y las empresas, aunque también señaló que a raíz de la pandemia se han dado nuevos hábitos que facilitan la labor de control por parte de la Agencia Tributaria, como el mayor uso de los pagos con tarjeta.

Por impuestos, recordó que la recaudación del IRPF creció un 7,5% en 2021 respecto a 2020, alcanzando los 94.500 millones de euros, y siendo un 8,8% superior a 2019.

En cuanto al Impuesto de Sociedades, subrayó que tras el “descalabro” de 2020 hubo un “repunte espectacular” del 67,9% en 2021 -12% sobre 2019-, que, sin embargo, considero como una cifra “anómala” que no se debe proyectar para el futuro, al haber estado originada por grandes operaciones, reestructuraciones empresariales y grandes inversiones.

Sobre este impuesto, Gascón apuntó que sería “utópico” pensar en alcanzar los ingresos que este tributo proporcionó en 2007 ya que fue “en plena burbuja inmobiliaria” y con el sector inmobiliario y el bancario representando más del 40% y aportando grandes “pelotazos”. De esta forma, señaló que los pasos a dar en el futuro deben ser hacia la armonización internacional, evitando que exista una “carrera a la baja” entre países.

Por otro lado, el IVA creció un 14,5% respecto a 2020 y un 1,1% sobre 2019, mientras que los Impuestos Especiales, cuya recaudación creció un 5% en comparación con 2020, son los únicos que mantuvieron sus ingresos por debajo del nivel de 2019, incluso en el arranque de 2022, con varios impuestos en retroceso desde hace varios años, como el de las labores del tabaco, o las rebajas fiscales aplicadas a la electricidad.

REFORMA FISCAL

En cuanto a una futura reforma del sistema tributario, Gascón valoró que el ‘Libro blanco’ elaborado por el grupo de expertos que encargó el Gobierno es “muy complejo y muy completo”, pero que “los tiempos son importantísimos” y, por tanto, en la “situación de incertidumbre” actual “quizás no es el mejor momento para afrontar medidas de carácter más estructural”.

En cualquier caso, aunque reconoció que en estos momentos “hay cosas urgentes que hay que acometer”, indicó que “eso no significa que te olvides de la cuestión de fondo y de hacia dónde tiene que evolucionar el sistema tributario”.

Por último, en lo referente a la plantilla con la que cuenta la AEAT, señaló el envejecimiento de la plantilla y que el porcentaje de jubilaciones al que se enfrenta este organismo “es enorme”, aunque valoró positivamente la recuperación de la cantera de opositores y valoró como “generosas” las ofertas de empleo público.