Según informaron a Servimedia responsables de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), la movilización consiste en repartir pormercados, galerías de alimentación y grandes superficies de toda España carteles y hojas informativas en las que solicitan a los consumidores españoles que eviten la compra de cualquier producto francés (vinos, quesos, perfumes, frutas, etc).

En la información que las organizaciones agrarias españolas quieren trasladar al resto de los ciudadanos figuran algunos datos sobre exportaciones de productos nacionales hacia Francia, con los que pretenden desbaratar el argumento de los productores de ese país ontra los artículos españoles.

Una cifra que, según las organizaciones agrarias, revela "la contradicción que suponen los ataques a los productos españoles en un país como Francia", es el aumento del 700 por cien de las exportaciones de agrícolas a galas a nuestro país desde que España entró en la CE.

Frente a esa favorable evolución de las ventas de artículos franceses a España, la UPA advierte que, desde 1986, el campo español no ha hecho más que perder cuota de mercado con los vecinos del otrolado de los Pirineos, al pasar de un saldo agroalimentario favorable de 57.500 millones de pesetas en esas fechas, a uno negativo en 64.000 millones a finales de 1992.