Herrero recordó que la presentación de presupuestos “es una obligación constitucional” para el Gobierno, ya que las cuentas públicas reflejan “cuáles son las intenciones” del Ejecutivo para el próximo año.

“El retraso en el ciclo presupuestario no es un tema baladí. El presupuesto del Estado es más que el presupuesto de una administración pública. El articulado de la ley de presupuestos tiene importantes repercusiones en otras administraciones”, comentó.

Además, el debate de presupuestos permite incorporar “otras sensibilidades de partidos políticos” que también representan a la sociedad española.

Sin embargo, la falta de texto y debate dificulta el control sobre los planes del Gobierno e impide saber si cumple o no con sus promesas presupuestarias, como expuso la presidenta de la Airef.

Herrero también informó de que, por el momento, la Airef no ha recibido ninguna convocatoria para el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), al que el organismo independiente acude sin posibilidad de voto. “Tiene que llegar 72 horas antes y no tenemos ninguna noticia”, confesó.

El CPFF es uno de los pasos previos a la presentación de presupuestos, ya que es la cita en la que el Ministerio de Hacienda discute con las comunidades autónomas los criterios de estabilidad financiera necesarios para las cuentas del siguiente ejercicio.

PRÓRROGA

Los actuales PGE son una prórroga de las cuentas de 2023, las últimas que consiguió aprobar el Gobierno de Pedro Sánchez.

Herrero admitió que esta posibilidad “está prevista para que no se paralice la Administración ni las políticas públicas”, si bien advirtió de que “no se puede vivir eternamente en un presupuesto prorrogado”. “Cada año que pasa con el presupuesto prorrogado, el presupuesto tiene menos flexibilidad para adaptarse a la realidad económica de cada momento”, alertó.

La presidenta de la Airef aclaró que “la gravedad de la prórroga permanente no es tanto la gestión del gasto del Estado” sino su consecuencia para el resto de Administraciones", que son las que se encargan de buena parte de esos recursos.

No obstante, recalcó que sí es competencia del Estado el gasto en Defensa, que en el contexto actual España se ha comprometido a incrementar. “Ahí el presupuesto se acomoda mal. En una prórroga, el presupuesto permite dar continuidad a las políticas, pero no contempla incrementos o nuevos compromisos”, comentó.