Así lo manifestó en su comparecencia a petición propia en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso para informar sobre las prioridades y retos de la política exterior española para 2023 y sobre la Estrategia de Diplomacia Humanitaria 2023-2026.

José Manuel Albares repasó los principales hitos de su actuación al frente de Exteriores y subrayó la aprobación en el Consejo de Ministros el 31 de enero de la primera estrategia española de diplomacia humanitaria.

El ministro afirmó que “se trata de un texto pionero que muy pocos países en el mundo tienen” y añadió que “es una muestra del compromiso de este Gobierno con la ayuda y con la acción humanitaria”. La estrategia “responde a un contexto internacional con crecientes necesidades también en el terreno humanitario”, unas necesidades “que se han intensificado con la agresión ilegal a Ucrania, con las crisis alimentarias que atraviesa el Sahel, con los recientes desastres naturales como el terremoto en Turquía y en Siria”.

Por otra parte, el jefe de la Cancillería señaló que la nueva estrategia “obedece también a la petición de actores y organizaciones de la sociedad civil, que nos han animado a tener más ambición en el ámbito humanitario”.

Para el responsable de la diplomacia, “el primer objetivo es el de prevenir y resolver conflictos y dentro de esta meta encontramos ejes como la diplomacia preventiva, la protección del espacio humanitario o la lucha contra el terrorismo”.

DERECHO INTERNACIONAL

El segundo objetivo, detalló, “es promover el respeto del derecho internacional humanitario violado tan grave y tan reiteradamente desde hace un año en Ucrania”, algo que, agregó, “es una exigencia para todos los conflictos armados”. Por ello, señaló, “España ha tenido un papel relevante en este contexto, apoyando las investigaciones de la Corte Penal Internacional en Ucrania, acogiendo la tercera Conferencia Internacional sobre escuelas seguras o promoviendo la resolución 2286 del Consejo de Seguridad que protege a las misiones médicas en conflicto”.

Un tercer objetivo de la estrategia dijo el ministro, “es proteger a las personas en situación de vulnerabilidad, sin dejar a nadie atrás”. Este objetivo se articula en cuatro ejes, dijo Albares, “y entre ellos la igualdad de género y la lucha contra la violencia sexual y la atención a refugiados y desplazados internos, es probablemente el principal”.

“Estos esfuerzos se inscriben en el marco de nuestra política exterior feminista y del protagonismo de España en la agenda de mujeres, paz y seguridad”, aseveró el ministro, que destacó que “en materia de protección a refugiados somos uno de los principales donantes de Acnur (la agencia de la ONU para los refugiados)”.

Por último, el titular de Exteriores señaló que en el proceso de elaboración de la estrategia bajo la coordinación de Exteriores han participado ocho ministerios, “especialistas de la sociedad civil, actores humanitarios como el Comité Internacional de la Cruz Roja”.

“En un contexto internacional adverso la ayuda humanitaria española ha tenido en los últimos años un crecimiento sostenido, superando en total el pasado año los 150 millones de euros y la nueva estrategia de diplomacia humanitaria es una señal más de nuestra intención de cobrar más protagonismo en el ámbito humanitario”, apostilló.