Así lo aseguró en respuesta a una pregunta del diputado del PP Óscar Clavell sobre si la ministra piensa que la reforma educativa va a mejorar la calidad y la excelencia del sistema educativo.

"Rotundamente sí", respondió Alegría, después de que el parlamentario reprochase a la también ministra María Jesús Montero que el PSOE gastase fondos públicos "en drogas y prostitución" en Andalucía en vez de en proyectos públicos como según el parlamentario hace el actual presidente andaluz en funciones, Juan Manuel Moreno.

El debate sobre la educación también derivó en otros asuntos políticos entre Alegría y Clavell. "Siendo usted valenciano, con el legado que dejó (el PP) en esa tierra tampoco está ustedes para dar muchas lecciones", respondió Alegría, que subrayó que parece que a los 'populares' se les "olvida mucho" el término "equidad" cuando hablan de educación, "para que todos los españoles puedan acceder en igualdad de oportunidades" a las políticas.

Por su parte, Clavell reconoció que se equivocó al pensar que Alegría no podría hacerlo "peor" que su predecesora en el ministerio, Isabel Celaá, que ahora está en Roma "evangelizando el mundo" y aventuró que la actual responsable de Educación "traspasará las riendas de la educación en peor estado que las recibió", pues el actual gobierno de Pedro Sánchez, según Clavell promueve la "desaparición" de la cultura del esfuerzo, el "regalo" de los títulos, el "empobrecimiento" y la "degradación" de la figura del profesor, así como la educación "como ingeniería social" y el "pensamiento único en lugar de fortalecer una democracia y libre". "Ese será su particular y terrorífico currículum cuando abandone el ministerio", zanjó.