Así se expresó en una declaración institucional desde el Palacio de Cibeles horas después de que se confirmara la suspensión de la parte final de La Vuelta, lo cual definió como una “vergüenza” para la ciudad y para la nación.

Almeida afirmó que lo ocurrido en las calles de Madrid “es fruto y resultado del odio y la violencia que llevan siendo alentadas de forma irresponsable durante los últimos días por dirigentes de la izquierda, por dirigentes del Gobierno y especialmente hoy por el presidente del Gobierno”.

Expresó que Madrid ha sido “testigo de una violencia que ha puesto en peligro los participantes de una competición deportiva y a los miles de madrileños que de querían disfrutar de la Vuelta Ciclista a España”.

“Hoy se han traspasado absolutamente todos los límites. Una mayoría radical no puede acabar con la tranquilidad de una ciudad, ni tampoco con el normal funcionamiento de una competición con décadas de prestigio y que es un orgullo y un motivo de orgullo para Madrid y para los madrileños”, aseveró.

El alcalde señaló que Madrid “no ha sido tomada por manifestantes pacíficos, sino por grupos violentos”. Insistió en culpar al Gobierno “y los partidos que lo sustentan” de haber dado “aliento” a estos grupos y una condena “firme e indubitada a los violentos” por parte del presidente del Gobierno, el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, y el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska.

“Tengan la total y absoluta seguridad, la certeza de que desde el Ayuntamiento de Madrid vamos a seguir protegiendo nuestra convivencia en el marco del Estado Social y Democrático de Derecho que propugna nuestra Constitución de 1978, que vamos a seguir poniendo todos los medios necesarios para que la convivencia, señal de identidad, divisa de la ciudad de Madrid no se vea alterada por minúsculos grupos radicales violentos que quieren no reclamar lo que está pasando en Gaza, sino destrozar la convivencia de una ciudad como Madrid”, añadió.

El regidor defendió el derecho a protestas pacíficas y pero advirtió de que “consentir” y considerar “normal” lo sucedido hoy “sería fatal para la convivencia”. Asimismo, sugirió que el apoyo a las movilizaciones por parte del Gobierno tiene como objetivo tapar “problemas políticos” del Ejecutivo. “La política no puede utilizar el deporte para tapar los problemas políticos que tiene el Gobierno de España”.

El alcalde aprovechó también para “hacer un reconocimiento especial a los ciclistas, a los equipos y a la organización de la Vuelta Ciclista a España que en un esfuerzo encomiable han querido finalizar la etapa”. Subrayó que “ningún ciclista es responsable de lo que está sucediendo en Gaza” y reprochó que quienes “han provocado la violencia durante estos días lo saben”, pero “pretenden demostrar que no caben más opiniones que las que ellos sostienen y que las que ellos mantienen”.

Finalmente, se dirigió a los madrileños para decirles que “tienen un ayuntamiento que está del lado de la convivencia, que está del lado de la democracia” y que se pondrán “todos los medios necesarios para que una ciudad como Madrid no tenga que volver a vivir un bochorno como el que ha vivido esta tarde”.