Almunia, que insistió en que éste es el elemento de mayor crítica política que los socialistas pueden hacer de los pactos entre populares y nacionalistas, echó en falta también que los negociadores del PP no hayan contado con el asesoramiento y respaldo de la Administración General del Estado, porque, en su opinión, alguno de los compromisos "parecen extraordinariamente difíciles de ser puestos en práctica".

En rueda de prensa en el Congreso, el portavoz socialista indicó que hay compromisos entre el PP y CiU de los que se desconoce su coste económico. En este sentido, añadió que su grupo es uno de los primeros interesados en conocer la cuantía de estos acuerdos porque pueden comprometer procesos como la reducción del déficit público.

Almunia consideró como una de las principales prioridades del trabajo parlamentaio la elaboración urgente de un presupuesto para 1997, que permita cumplir las condiciones de convergencia europea. "Esto es de una urgencia e importancia tan grandes que sólo este hecho justificaría la necesidad de haber formado una mayoría parlamentaria", concluyó.