AMNISTÍA, GREENPEACE E INTERMÓN PIDEN A LOS PARTIDOS ATENCIÓN ESPECIAL A LA POBREZA Y AL CAMBIO CLIMÁTICO
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Amnistía Internacional, Greenpeace e Intermón Oxfam consideran que "los derechos humanos, la lucha contra la pobreza, o los compromisos contra el cambio climático no pueden ser incluidos como un adorno, sino que tienen que estar en el corazón de los programas electorales" y formar parte "esencial" de la agenda del Gobierno que salga de las urnas el próximo 9 de marzo.
A juicio de estas tres organizaciones, los retos de la próxima década exigen a los partidos "ir más allá de las meras declaraciones" e incorporar en sus programas políticas concretas.
El director de AI España, Esteban Beltrán; el director ejecutivo de Greenpeace España, Juan López de Uralde; y la directora general de Intermón, Ariane Arpa, pidieron hoy a los candidatos electorales que asuman estos retos globales como propios y que los impulsen tanto desde el Gobierno como desde la oposición.
"Tenemos cuatro años por delante para reconocer que la tortura existe dentro y fuera de nuestras fronteras, para dejar de ser uno de los países europeos sin datos sobre racismo, y para pasar de políticas migratorias de mero control fronterizo a políticas basadas en los derechos humanos", dijo Beltrán
Por su parte, Juan López Uralde señaló que "es hora de asumir el compromiso de actuar para frenar el cambio climático y adoptar un modelo de desarrollo más sostenible". A su juicio, "la pasividad no es una opción ante un problema que nos está afectando a todos".
Ariane Arpa, directora general de Intermón, añadió que "la apuesta de España con el desarrollo y la protección de las personas amenazadas por los conflictos deben estar muy por encima de los intereses particulares de los partidos".
DECÁLOGO PARA LA LEGISLATURA
Estas tres ONG han elaborado un decálogo de propuestas para la próxima legislatura, que contiene propuestas concretas sobre cambio climático, derechos humanos, política migratoria y reducción de la pobreza.
Entre esas propuestas se encuentra que el 50% de la electricidad que se consuma en 2020 provenga de fuentes de energía renovables y que se reduzcan en un 30% las emisiones de CO2.
También proponen que España destine 1.000 millones de euros anuales a finales de la próxima legislatura para paliar los efectos del cambio climático "en los países más pobres, que son los que menos contaminan pero los que más duramente están notando sus efectos", un dinero que debería ser adicional a los compromisos de Ayuda Oficial al Desarrollo.
(SERVIMEDIA)
30 Ene 2008
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