En una nota de prensa llamó a estos países a dar marcha atrás y subrayó que los hechos de los que se acusa al personal de la agencia, aunque graves, "aún no han sido probados". Según AI, las "presuntas acciones de unas pocas personas" no deben utilizarse como "pretexto" para cortar la asistencia vital a Gaza, cuya población "enfrenta serio riesgo de genocidio".

AI valoró que España, Noruega, Irlanda y bélgica hayan anunciado que no retirarán la ayuda a Unrwa. Japón, Francia, Países Bajos, Italia, Alemania, Reino Unido, Suiza y Finlandia se han unido a Canadá, Australia y Estados Unidos en su decisión de cortar toda financación a la Unrwa. Juntos representan más de la mitad del presupuesto de Unrwa en 2022, destacó AI.

En su opinión, las acusaciones de que unos 12 trabajadores --de una plantilla de 30.000-- estuvieron involucrados en los ataques de Hamás del 7 de octubre "deben investigarse con rigor e independencia".