Anguita salió así al paso de las informaciones que aseguran que el líder de IU habría comunicado a algunos de sus colaboradores la posibilidad de no volver a concurrir a la reelección en el V Congreso.

En posterior rueda de prensa, Anguita manifestó que quería "cortar por lo sano" todo tipo de rumores sobre este tema y desde hoy anunciaba que se postula a la renovación para el cargo, siempre que cuente con el respaldo de sus compañeros.

En la Presidencia Federal, Anguita exiió "cohesión" y "lealtad al proyecto de IU" a todos los miembros de la dirección, y les pidió que pongan fin a los enfrentamientos de carácter personal que mantienen algunos de ellos a través de los medios de comunicación en las últimas semanas.

Sin mencionarlo de forma explícita, aludió claramente a las noticias que aseguran que hay malestar en el seno del grupo parlamentario del Congreso con la portavoz, Rosa Aguilar, por su excesivo "personalismo" en la toma de decisiones.

Anguita pidió a sus irigentes que debatan y expresen su malestar en público, y que por "decencia política" no utilicen a los medios de comunicación para mostrar en secreto su disconformidad con los órganos de dirección.

El líder de IU dijo en rueda de prensa que apoya totalmente a Rosa Aguilar, como hace siempre que algún dirigente se ve atacado injustamente por personas que no se identifican.

COHESION IMPOSIBLE

La Presidencia Federal aprobó hoy, con el voto en contra de los representantes de Nueva Izquierda, el nevo organigrama de dirección propuesto por Julio Anguita.

De la reestructuración destaca la prevista sustitución de Mariano Santiso como coordinador de la Presidencia por el actual secretario de Relaciones Político-Sociales, Víctor Ríos.

Santiso pasa a ocuparse del cargo que deja Ríos, con el fin de tener más tiempo para dedicarse a su tarea como diputado por Asturias. La Presidencia también aprobó hoy que Anguita se encargue temporalmente de la coordinación de Areas y Programas hasta que se encuntre un sustituto al dimitido Javier Esperanza.

La propuesta de nuevo organigrama también contenía ligeros retoques en la asignación de áreas a cada dirigente, así como una ampliación de la Ejecutiva a tres miembros, que fue lo que provocó el voto negativo de Nueva Izquierda.

El líder de los renovadores, Diego López Garrido, aseguró que habían votado en contra porque la nueva dirección no refleja la pluralidad de IU, y Nueva Izquierda "se ve discriminada una vez más en el reparto de las principals responsabilidades".

López Garrido citó concretamente el caso del área de Interior, que se le quita a él para dársela al ex diputado José Luis Núñez, adscrito al sector mayoritario. "La pluralidad no aumenta, sino que disminuye y así la cohesión es imposible", dijo en respuesta a la intervención de Anguita.

Para Nueva Izquierda, la reestructuración de la dirección de IU propuesta por Anguita no era tampoco la que se necesitaba para dar una respuesta adecuada al descalabro electoral sufrido el 3-.