Ardanza advirtió de que este clima de incertidumbre y crisis permanente contamina la percepción que la sociedad tiene de cualquier actuación política.

"No está en manos de mi Gobierno dar solución a esta crisis. Pero, sí me incumbe, como representante ordinario del Estado en nuestra comunidad, denunciar esta situación difícilmente sostenible y apelar a la responsablidad del Gobierno central y de todos los partidos", afirmó.

El presidente vasco centró su discurso, con el que inauguró el curso político en la Cámara autonómica, en la situación de violencia del País Vasco. Afirmó que, mientras los que apoyan esta violencia no sean capaces de buscar la paz apoyándose en el diálogo, poco se podrá avanzar en el plano político.

Sin embargo, Ardanza recalcó que la postura de los violentos no exime de responsabilidad a los partidarios de la democracia "en la búsqued efectiva de caminos de pacificación, en la construcción de puentes hacia el acuerdo y la reconciliación y en la manifestación permanente de nuestra diposición a soluciones acordadas, desde el respeto del pluralismo de opiniones y la renuncia a la violencia".

ESTRATEGIA CALCULADA

El lehendakari dijo que el fenómeno de la violencia en Euskadi es "preocupante, pero ni alarmante ni generalizado". A juicio de Ardanza, decir que la sociedad vasca es una sociedad crispada se ha convertido en un tópico.

El presidente del Gobierno vasco ha matizado, no obstante, que el ejercicio de la violencia ilegítima, que hasta hace pocas fechas estaba reservada a la organización armada ETA, se ha extendido en los últimos tiempos a las acciones de elementos de la izquierda abertzale que provocan altercados callejeros.

"Esta nueva fase de la misma violencia antidemocrática no es una manifestación espontánea de un descontento político o social difícilmente detectable, sino que responde a una estrategia fríamente dseñada, organizada y dirigida desde los órganos que controlan el MLNV", dijo Ardanza.

El lehendakari realizó en su discurso un amplio repaso a la actividad legislativa del Gobierno tripartito PNV-PSOE-EA, que tiene en marcha proyectos como el nuevo marco de política industrial o el plan de infraestructuras que están prácticamenete elaborados.

Asimismo, Ardanza hizo mención a los buenos resultados de la economía vasca durante el primer semestre del año, un crecimiento superior al del resto del Estdo y al de Europa, y que ha atribuído a la estabilidad institucional vasca.

El lehendakari dedicó sus primeras palabras a recordar a José María Aldaya, "injustamente privado de libertad sin otro motivo que forzar el pago de un rescate a la organización ETA", que cumple hoy 142 días secuestrado.